En el resumen del documento se lee lo siguiente: "Se examinan las principales recomendaciones para que los institutos o comisiones de derechos humanos puedan funcionar con autonomía respecto del Estado y, también, respecto de grupos de interés que intentan capturar sus agendas. Se analiza críticamente el diseño institucional del Instituto Nacional de Derechos Humanos chileno y luego se evalúa la composición de su consejo. Se demuestra el carácter parcial de sus líneas de investigación y se sugieren ciertas modificaciones tendientes a fortalecer su independencia."
Tras la publicación del documento, vinieron las reacciones y las defensas al mismo. Primero vino una declaración por parte del propio Instituto Nacional de Derechos Humanos, que se encuentra aquí. Luego se publicaron diversas columnas de opinión al respecto y algunas de ellas se encuentran seleccionadas en este post.
Sergio Verdugo y José Francisco García: Politización del Instituto Nacional de DD.HH.
El Instituto Nacional de DD.HH. (INDH) es un órgano estatal encargado de promover y proteger los derechos humanos. Debiendo ser un ente independiente, plural y que rinda cuenta de su labor, ha tendido a promover una agenda sesgada, arriesgando transformarse en una ONG más y, lo que es peor, perder legitimidad social.
Patricia Politzer: Los derechos humanos y nuestra confusión mental
Más allá de cada uno de estos casos en su mérito, cabe preguntarse si la simultaneidad de los ataques al Museo de la Memoria y la INDH son mera coincidencia. Ojalá así sea y que nada de esto esté relacionado con la discusión del Presupuesto que ya se inicia. Ambas instituciones dependen de Presupuesto de la Nación y sus posibilidades de contribuir a una democracia más sana están íntimamente ligadas a los recursos que se le asignen
Sergio Verdugo: La izquierda jurídica y la institucionalidad de los DD.HH.
El sistema político debe entregar representatividad a todas ellas, y generar espacios adecuados para su discusión y para una articulación equilibrada entre el interés de las mayorías y el respeto por minorías desventajadas. El rol del INDH puede ser importante en este aspecto.
Judith Schönsteiner: ¿Derechos humanos “de izquierda” y “de derecha”?
En respuesta a la “Radiografía al Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH)”, publicada por el Instituto Libertad y Desarrollo, la directora (i) del Centro de Derechos Humanos de la UDP escribió la siguiente columna de opinión. La autora indica que el estudio de Libertad y Desarrollo “funda sus argumentos en una lectura poco convincente que distingue entre derechos humanos conservadores o liberales, versus derechos humanos igualitarios o igualitaristas”. En su columna, rechaza esta división, que considera artificial, y valora la forma en que el INDH lleva a cabo la misión que se le ha encargado por ley.
Partidización en la academia: réplica a García y Verdugo
Para alguien que reconozca la imposibilidad de la neutralidad en la teoría social, es algo perfectamente legítimo y aceptable. El punto es que un reconocimiento tal les impediría a García y Verdugo denunciar la politización del INDH sin advertir la partidización de la academia operada por ellos mismos.